23 de Octubre del 2023
Génesis 3: 9 y 13 “Más Jehová Dios llamó al hombre y le dijo ¿Dónde estás tú?
Entonces Jehová Dios dijo a la mujer ¿Qué es lo que has hecho?
Terminada la creación Dios pone a Adán y a Eva en el jardín del Edén con una clara restricción “No comer del árbol del bien y del mal porque el día que coman de él morirán”. Eva sin embargo, dejándose engañar por las astutas palabras de la serpiente, que le conduce a cuestionar lo que le había dicho Dios, cae y junto con ella Adán, desobedeciendo así lo ordenado por Dios. Eva seducida por el deseo de ser igual a Dios, empieza a mirar el árbol de una manera que antes no lo había hecho.
En el verso 6 dice que “Vio que el árbol era bueno para comer, agradable a los ojos y codiciable para alcanzar sabiduría”. Es extremadamente peligroso dialogar con el enemigo porque en su astucia hará que aquello que es claramente malo, lo empecemos a mirar con otras perspectivas, que lo único que harán es conducirnos a la desobediencia, y como resultado de ello a perder nuestra comunión y relación con Dios.
Dios viene al Edén y conociendo lo qué pasa (por su omnisciencia) los llama ante lo cual ellos se esconden avergonzados y con miedo porque ahora que sus ojos fueron abiertos al mal, saben que están desnudos. ¿Dónde estás tú? Le pregunta a Adán y ¿Qué es lo que has hecho? a Eva, respondiendo ambos sólo con escusas y ninguno reconoce que simplemente fallaron y le desobedecieron a él. Hermanos si le hemos fallado al Señor, hoy también nos llama a reconocer nuestras faltas, sin dudas Él ya lo sabe, pero desea nuestro arrepentimiento y está dispuesto una vez más a cubrir nuestra vergüenza de pecado por medio de Jesucristo.
Adán y Eva torpemente trataron de cubrir su desnudes con hojas de higuera, sin embargo, Dios les hace túnicas de pieles, que nos deja ver lo amoroso y cuidadoso de nuestro Padre de los cielos que, aunque le fallemos, siempre tiene el cuidado que necesitamos.
Maravilloso Padre muchas gracias porque aun cuando le fallamos, Usted viene a nuestro encuentro y nos da la oportunidad de arrepentirnos, hoy le pedimos perdón en el nombre de Jesús por nuestras desobediencias y rogamos nos ayude cada día, para no prestar oídos al enemigo.
Amados hermanos que la gracia del Señor Jesús nos permite seguir Creando Puentes de verdadero arrepentimiento cuando hemos pecado.
Punto de reflexión:
Es bueno preguntarnos ¿Dónde estamos en nuestra relación con Dios? Y ¿Qué estamos haciendo respecto del mandato suyo? Estamos en relación de comunión con Dios y en obediencia a sus mandatos, O estamos haciendo lo que nuestro sutil y astuto enemigo quiere.
Que Dios les bendiga (Mercedes Cobeña)
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