21 de Septiembre del 2023
Salmo 37:23 “Por Jehová son ordenados los pasos del hombre, Y él aprueba su camino”
Cada vez que buscamos la voluntad de Dios para nuestras vidas, por medio de la oración y la lectura sosegada de su Palabra, podemos ver como su mano determina el curso de nuestros pasos. Por ejemplo, Pablo, el apóstol, fue dirigido por la poderosa mano del Señor que le impidió ir a Asia y lo encaminó rumbo a Macedonia, donde sería de gran bendición para la naciente iglesia del lugar, demostrando que el curso de nuestras vidas no puede estar a merced de nuestros intereses personales. Tenemos la seguridad que no seremos avergonzados en tiempos difíciles y tendremos más que suficiente aún en tiempo de hambre, asegura el salmista. Porque, el propósito de Dios es dirigir nuestros pasos diariamente, y ha puesto su Espíritu en nosotros para revelarnos su voluntad en forma progresiva. Primero trata pequeños asuntos con indicaciones breves en cada situación que necesitan ser cambiadas. Nuestra disposición es de entrega incondicional a su voluntad. Cuando damos el primer paso, todo lo que viene va a ser respaldado por una gradual transformación, con la seguridad que Él sostiene nuestros pasos.
Señor amado, muchas gracias por tu permanente provisión, aún en los tiempos más difíciles; rogamos tu fortaleza en nuestra determinación de cultivar, cada día, el carácter que deseas en nosotros. Guíanos en el crecimiento espiritual escudriñando y practicando tu poderosa palabra que nos permite ordenar nuestros pasos.
Amados, amadas que la gracia del Señor nos permita seguir: “Creando Puentes” de pasos concretos a la obediencia.
Desafío personal
Permítale a Dios que tome la dirección, primeramente, en pequeños asuntos, y Él le va a mostrar lo que necesita cambiar.
Pon atención a su voz, aunque no sepas hacia donde te está guiando; Él ses abio y desea que renuncies a tus ambiciones y deseos personales.
Recuerda que, su propósito es la completa transformación de tu vida.
Dios te bendiga. (José Mazurett)
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