15 de noviembre de 2023
Salmo 73: 16-17 “Cuando traté de comprender todo esto, me resultó una carga insoportable, hasta que entré en el santuario de Dios; allí comprendí el fin que les espera
Asaf fue organizador y líder de los coros de David, nos presenta este salmo con una visión inicial de injusticia y frustración, el versículo desprendido se encuentra contextualizado en una problemática común a todos los tiempos: ver que los impíos tienen prosperidad y en ocasiones más que los que temen a Dios. Sabemos que Dios es bueno, es la primera afirmación que realiza Asaf al inicio del salmo 73, esta es una declaración de la condición de Dios, por tanto cualquier otra apreciación que escape de la bondad de Dios está errada en relación a este atributo, por tanto el juzgar nuestro acontecer diario desde la sensación que Dios es con unos bueno y con otros malo, solo puede estar justificada por nuestra sesgada mirada de lo que para nosotros parece ser justo o no, medido bajo nuestros parámetros. Quizás pudiéramos partir de la base que todos somos igualmente impíos.
Pensar que Dios se equivoca en esta distribución no está fuera de las reflexiones de un cristiano y quizás más de alguna vez ha significado un peso para nuestra fe. Ver el crecimiento económico de otros obtenido de cosas ilícitas o engaños, saca de nuestro interior la envidia, cuestionando el orden de Dios de las cosas. Asaf reconoce que sus declaraciones estaban en un error, valorando cosas que no son importantes. Estamos equivocados, no debemos basar nuestra fe y mucho menos la naturaleza de Dios por lo que sucede en esta tierra, el libro de Eclesiastés bien habla de lo que significa lo volátil de lo terrenal y la vida misma, cuantas veces juzgamos el destino de los delincuentes, o los que hacen mal a otros, o quienes cometen atrocidades, al punto de convertirnos en los asesores de Dios.
Asaf entra al santuario de Dios, para nosotros hoy puede ser sólo conectarnos él, a la corta distancia de una oración o de una alabanza, o de igual forma con la reflexión expuesta en una reunión en nuestra iglesia, y al igual que él podemos recibir esta nueva perspectiva, que va más allá de nuestra justicia, y que desea mostrarnos todo el tiempo que lo importante es Él. Es en su presencia donde comprendemos el problema, es donde recibimos respuesta, y paz cuando esa respuesta no es lo que esperábamos o queríamos.
Amado Dios, reconocemos nuestras constante quejar frente a lo que nos parece injusto, perdona nuestra incapacidad de ver que no se trata de nosotros, que hay un plan mucho mayor a este mundo, abre nuestros ojos y nuestro corazón a tu mirada de lo que es importante, lo pedimos en tu nombre Jesús.
Amados, amadas que la gracia del Señor nos permita seguir: “Creando Puentes” de Dirección en Cristo
Punto de reflexión
Muchas veces buscamos explicaciones desde nuestra humanidad, permitamos que por medio de la perspectiva de Dios y Su eternidad aceptemos con gratitud lo que Él nos da.
Que el Señor te bendiga (Paulette Díaz)
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